Agentes de la Policía Nacional, en una operación conjunta con la Polícia Judiciária de Portugal, han desarticulado una organización criminal dedicada, presuntamente, al tráfico de drogas y asentada en la localidad malagueña de Torremolinos. Han sido detenidas cuatro de sus miembros durante una operación en la que han intervenido un total de 1.680 kilogramos de cocaína durante el abordaje y la inspección de una embarcación. Esta operación policial ha sido apoyada por EUROPOL.
Las investigaciones comenzaron en marzo de 2024, cuando los agentes lograron identificar a cada uno de los integrantes de esta organización asentada tanto en Dinamarca como en Torremolinos. Todos sus miembros estaban vinculados con el transporte internacional de cocaína, y para ello utilizaban embarcaciones de recreo tipo velero.
Durante la fase inicial de la investigación, se localizó una de las embarcaciones que la organización usaba para realizar estas singladuras transatlánticas. Se encontraba atracada en el puerto de Portimão, en Portugal, y se pudo identificar a sus principales integrantes, que se desplazaban desde Torremolinos hasta esta ciudad para realizar los preparativos y las comprobaciones pertinentes en la embarcación.
Con el avance de las gestiones policiales, los agentes comprobaron que esta organización disponía de más embarcaciones de este tipo, localizando una de ellas en el puerto de Cap d’Agde, en la costa mediterránea francesa. Diversos problemas técnicos surgidos en este velero hicieron que la organización se decantase para el transporte de estupefaciente por la embarcación que mantenía amarrada en Portugal. Al mismo tiempo, los agentes consiguieron identificar a otros miembros de la organización.
En junio de 2024, la organización comenzó la navegación hacia el puerto marroquí de Tánger, donde dejaron la embarcación atracada durante dos semanas. Tras este viaje se dirigió al puerto de Cádiz, donde permaneció atracada otros dos meses. En todo este tiempo, la tripulación realizó únicamente labores de mantenimiento y limpieza de la misma, en aparente situación de espera de instrucciones u órdenes de los responsables del transporte del estupefaciente. Tras pasar prácticamente todo el verano en territorio español, el velero regresó a su puerto de origen, en Portimão, donde fue subido a “dique seco”. Posteriormente, la tripulación lo abandonó para regresar a su país de origen, realizando previamente un viaje hasta Torremolinos, donde residían los líderes de la organización investigada.
Debido a la falta de actividad momentánea por parte de esta organización y al abandono del territorio nacional de los integrantes afincados en Torremolinos, se solicitó el sobreseimiento judicial de la causa, a la espera de nuevos acontecimientos que pudieran permitir su reapertura en caso de llegar a producirse.