Agentes de la Policía Nacional han detenido a un pirómano de 43 años acusado de provocar numerosos incendios con un grave riesgo para las personas, incluyendo un fuego declarado en un bloque de viviendas habitado y dos intentos de prender fuego a un indigente. El detenido también está implicado en múltiples incendios de material de obra, colchones y contenedores, así como en un incendio que llegó a dañar un edificio escolar y obligó a suspender las clases.
Los hechos motivaron una intensa investigación por parte del Grupo de Policía Judicial de Marítimo después de que un incendio en un edificio afectara a todos sus moradores. A partir de ahí, los agentes consiguieron relacionar el suceso con otros episodios similares ocurridos en la zona y que seguían un patrón común: un varón que prendía fuego de forma reiterada y compulsiva.
Un pirómano experto en generar fuego con rapidez
Según la Policía Nacional, el detenido se había convertido en un experto en generar fuego con facilidad y conseguir que se propagara en cuestión de segundos gracias al uso de materiales altamente combustibles. Los daños ocasionados por sus acciones superan los 20.000 euros, sin contar el riesgo para las personas que se encontraban en las zonas afectadas.
Uno de los episodios más graves que se investigaban tuvo como víctima a un indigente al que intentó quemar en dos ocasiones. En ambas, la rápida intervención de los vecinos evitó una tragedia.
La Policía llevó a cabo diversas gestiones para identificar al presunto autor y recabar testimonios que confirmaran su implicación en todos los incendios. Una vez reunidos los indicios suficientes, los agentes procedieron a su detención.
El arrestado, que cuenta con antecedentes policiales, ya ha pasado a disposición judicial. El juez ha ordenado su ingreso en prisión provisional como medida cautelar mientras continúa la investigación. FOTO DE ARCHIVO
